Apocaliptico (Normal)

Esta civilización que un día había llegado hasta la sima de lo inalcanzable. de riqueza y derroche, de pulular como reyes entre los demás, de crear y consumir con descuido, de malgastar los recursos que parecían infinitos al tenerlos siempre a la mano; un día tuvo que despertar a la cruel realidad, los recursos que una vez parecieron infinitos arrasaban con ellos, dejando a su paso el desastre y la contaminación, mostrando que había un fin para todo, y que este estaba próximo.
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El mundo hacia mucho tiempo había dejado de ser lo que una vez fue, las bellos paisajes y el aire fresco eran recuerdos que solo quedaban plasmados en los viejos libros de aquella literatura que perduro aun cuando la guerra había arrasado con todo, aquella insensible humanidad que había desperdiciado lo que ahora escaseaba y que se necesitaba tanto, había finiquitado con la guerra y el tiempo, la superficie de la tierra era solo habitada por los animales que vivían entre las ruinas y la nueva vegetación que surgía de las constantes mutaciones que sufría la tierra gracias al nuevo ambiente al que se estaba expuesto. pronto aquellas especies que habían estado escondidas para su protección de la dominación de los humanos sobre la tierra, reaparecieron, formando alianzas y creando una ciudad para ellos, esos sucesos le daban vida a la ilusión de un día poseer la tierra, para ellos parecía hacerse algo ya alcanzable la vida sin tener que esconderse entre las sombras de una raza tan nociva como lo era el hombre.

los seres humanos estaban en su decadencia, era la hora de formar un nuevo imperio; pero ellos también poseían el instinto con el que había nacido el hombre, eran ambiciosos y ellos también decayeron en su intento, los Lupo Mannaro y Válnak eran razas que habían estado en la oscuridad, escondidos para su sobre vivencia, subyugados por el poder de la humanidad, pero esto cambiaba. los daños que el humano había hecho sobre el planeta parecía no haber afectado su extraña genética, y estos les daba una ventaja que supieron aprovechar, pero había algo que detenía a estas dos razas; la guerra entre los dos pueblos era tan arraigada y poderosa que no sabían hacer mas que discutir entre ellos, destruyendo lo que el otro lograba crear en ese hostil ambiente, el desarrollo de los lupo mannaro y los valnak fue reducido y no muy significativo, el mundo nuevamente parecía caer en el odio y el desdén, parecía que nada cambiaba, todo seguía cayendo en la perdición sin miras a detenerse...
la humanidad empezaba a germinar, nacían nuevos niños que fácilmente se adaptaban al medio, tanto que esta nueva generación ahora era mas poderosa, mas inteligente, nacían con habilidades que antes no se lograban imaginar como reales, como posibles; esta era la generación de los super hombres, una nueva civilización, mas rápida, mas inteligente, mas poderosa. esta gran comunidad que crecía al norte del mundo era gobernada por un joven líder, uno que estaba dispuesto a sacar de aquella oscuridad a su pueblo, una ambiciosa meta crecía en el, y orgulloso de lo que habían logrado el estaba dispuesto a que su pueblo renaciera para poblar aquel mundo del que una vez les había tocado huir para no morir en el intento, cinco años después de haber subido al gobierno aquel líder había creado todo un inmenso y productivo país, uno que surgía de entre las cloacas para apoderarse del mundo entero, el país de hingeõhk se alzo como un submarino que emergía de las profundas aguas, rápidamente modernas construcciones, elevados complejos, monturas artificiales que simulaban la vida que una vez existió y la perfecta adecuación de la nueva flora y fauna a las construcciones que ahora se alzaban inmensas en la tierra, fueron el inicio que abrió la oportunidad de volver a tomar el control, de ser nuevamente una potencia, de ser el apoderado sobre aquella tierra sin dueño...

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